Empieza todo con un simple: ¡Hola!
Pero las personas, a medida que pasa el tiempo, van creciendo, igual que van creciendo las mentiras, te van haciendo daño, hasta que te han echo suficiente fuerte como para poder ser capaz de decir basta y a la vez te han ayudado a saber quien es de verdad y quien no. Aveces te sientes perdida, crees que no hay nadie ahí pero sin darte cuenta alguien te empuja adelante. Le agradeces el gesto, pero sin ilusión, piensas que te fallará como el resto. Ya no es fácil poder confiarle a alguien tus preocupaciones. Así que vas llenando tu alma hasta que no puedes más y "explotas" y esa persona sigue estando ahí, sin haberte fallado aún. Se va haciendo grande, va dejando una pequeña huella en tu interior. Sientes como esta confiando en ti y cuando es valiosa como una hermana, todo tiene que terminar. Pero no es el final. Una grande distancia nos separa pero nuestras almas siguen juntas este duro camino.

No hay comentarios:

Publicar un comentario